Post-fiestas

Bueno, ya pasó la Fira i festes 2009 en Gandia. Como un año más, los niños subieron a las atracciones de la feria (Aitana cada año pide más, pide más...), jugaron a los juegos de la calle y vieron teatrillos y espectáculos. Por lo menos ellos disfrutaron, porque hay que ver lo que ha cambiado la Peña Toqueta: antes no se salvaba ningún teatro, espectáculo o concierto de nuestra visita y crítica despiadada, y ahora (bueno, desde que tenemos descendencia) a lo máximo que vamos es a ver uno de los teatros que hacen por la calle... En fin, el tiempo pasa.

Entre los teatros que vimos (ya que al Tricicle no fuimos) vimos a Mimirichi (aunque estaba anunciado su espectáculo "Paper World", por lo que he leído y las fotos que he visto me parece que hicieron una versión "light" o adaptada a la representación callejera). Estuvo bien, y al final nos reímos bastante (Javi vió peligrar sus gafas, nos cubrimos con papel, hubo una "pelea" de bolas y bolazos de papel...).
También vimos otros teatros infantiles, como "Pinotxo, el titella", de la compañía Lluerna Teatre, o "Superplast", de la compañía Hortzmuga (este me pareció graciosete; una pega que le vi es que hablaban muy rápido, creo que a los niños, sobre todo los más pequeños, les costaba un poco entender a veces lo que decían). Es muy difícil coincidir con todos los miembros de la Peña, pero por lo menos en alguna cosa pudimos vernos, ¿no?

Lo de los juegos por la calle para los niños también suele estar bien. Por lo menos a los niños les gusta, basta con ver que normalmente estos juegos estaban a tope de gente.

Pero, bueno, también vimos algo de espectáculos para gente de más de 10 años (alguna presencia residual, pero por lo menos llegamos a ver algo). Por petición expresa de Juan, vimos unas 4 canciones de la banda tributo a Bruce Springsteen, y luego le convencí para ver lo de Floten Tecles (basta con decirle que sale un piano para que se olvide de todo lo demás).

También tengo alguna crítica a estas fiestas, como que han habido varias incongruencias o cambios de hora y ubicación con respecto del programa, lo que causaba algún que otro contratiempo; lo malo es que no avisaban ni nada de los cambios, sino que tenías que ir averiguando las cosas por casualidad. También se podría haber ahorrado el ayuntamiento todos los panfletos de publicidad que repartían, porque muchísimos acababan por el suelo.

Bueno, ¿alguna otra opinión? ¿Algún comentario al Tricicle (sin ponerme mucho los dientes largos)?